El verano… esa estación del año en la que sudas como un cerdo, llueve a la vez que hace calor (lo que te impide taparte a gusto de la lluvia), en la que vuelven los mosquitos cual turrón por navidad… pero el verano también tiene cosas buenas, te trae alegrías como por ejemplo las vacaciones, el buen tiempo para ir a la playa, las ensaladitas frescas, los paseos por la noche… los guiris rojos como cangrejos luciendo sandalias con calcetines (puede que a esto último no le veáis la parte positiva, pero creedme que la tiene. ¿Tú cuando ves esto no te ríes y te alegras aunque sea un poquito? Pues eso).
Volviendo al tema de los mosquitos, que es de lo que quería yo hablar. Creo que a esto no le puedo buscar aspectos positivos… los mosquitos, esos insectos tan pequeños, tan oportunos, tan raros… tan, tan, tan… sí, tan toca huevos. No quería entrar en insultos a las criaturas pero no lo puedo pasar por alto.
Imaginemos esta situación: “Llegas a las 10 de la noche de un duro día, pues has estado en la playa y con lo que cansa eso… te metes en la ducha, cenas y ahora que ya estas a gusto, te vas a ver la tele y después te metes en la cama. Al principio cuesta pillar postura, cuando lo consigues y empiezas a atontarte… bzzzz… pasas de ello pero a los 30 segundos vuelves a oír bzzzz, te tapas la cabeza con la sábana pero 1.hace calor y 2.te ahogas al cabo de 2 minutos, te destapas… bzzzzzzz, de repente para el sonido y lo primero que haces es espantar cerca de tu cara porque crees que el maldito bicho está intentando picarte… al final consigues dormirte y solo pueden pasar dos cosas: que te duermas, no vuelvas a tener noticias de la criatura pero a la mañana siguiente te levantes con un picotazo o que el mosquito dichoso te despierte a las 3 de la mañana, y así, sucesivamente, pero bueno, eso ya depende de si el mosquito es o no considerado.”
Una cosa curiosa de la que me he enterado es de que los mosquitos que pican son las hembras pero que el sonidillo este le hacen todos, es decir, que si por una casualidad, tienes la ventana abierta y se te cuela un mosquito macho, y por la noche te molesta… ¡ES POR VICIO! Será posible… entiendo que la hembra quiera buscar su comida, y ya de paso por molestar, te pasa por la oreja ¿no? Pero es que ya lo del macho es para tirarse de los pelos… aunque ahora que lo pienso ¿Cómo se distingue a un mosquito macho de uno hembra? ¿Le dejo que se me pose y su me pica era hembra sino era macho?... porque si tienen algo, llamémoslo más a la vista, si que hay que ver bien… claro que no tengo tiempo para pensar si el bicho es bicho o bicha (sí, sé que no existe ese palabro pero si una vez alguien habló de los miembros y las miembras del parlamento ¿por qué yo no? Así que no me lo pienso dos veces y le estampo contra la pared o le asesino sutilmente con un spray que cualquier día me mata a mí también.
No quiero extenderme más, últimamente tengo fijación por levantarme de la cama en plena noche a escribir y no quiero que se convierta en costumbre, además es verano, y claro, hay mosquitos… no seré yo quien les quite la ilusión de molestar a alguien esta noche, ahí os quedáis.
Sara Maceira Gutiérrez.
ARG.